06 May Nuevo coche de caballos.
Para comodidad y delicia de nuestros novios, disponemos de un nuevo coche de caballos que acabamos de estrenar. Elegante, bonito, ¡una verdadera maravilla! Por supuesto se puede personalizar con ramos de flores, cintas, lazos…
Durante años los coches de caballos han sido signo de nobleza y alta posición social. Con el paso del tiempo ha ido cambiando y hoy en día los coches de caballos se utilizan tanto para el turismo como para disfrute personal. Signo de elegancia llegar a la iglesia, o al banquete en uno de estos coches tirado por hermosos corceles.
Nuestro nuevo coche de caballo hará las delicias de los novios y asistentes, es elegante, funcional y, por supuesto, personalizable.
Nuestros caballos, cuidados día a día y criados con mimo y cariño, serán los encargados de llevar, dirigidos por nuestro auriga (o cochero), a la pareja a su destino.
Les dejamos con un artículo que nos ha resultado sumamente interesante:
» De acuerdo con la Real Academia Española, la palabra carruaje proviene del provenzal “cariatge” y la define como un vehículo formado por una armazón de madera o hierro, montada sobre ruedas.
Los carros de transporte reciben diversas denominaciones en función de sus características. En los de personas, los términos utilizados para los vehículos de tracción animal son coche de caballos o diligencia. La carreta es un tipo de carro largo, estrecho y más bajo que el común, con una lanza, en donde se sujeta el yugo, se le denomina coche de caballos al carruaje mayor de cuatro ruedas compuesto de una caja grande, semicircular o de otro tipo suspendida en correas o puesta sobre muelles con dos portezuelas laterales y ventanillas con cristales dentro de la cual hay asientos para dos, cuatro o más personas.
Derivada de la palabra carro, se pueden encontrar varias palabras como acarreo (transportar en carro), carretada (carga que lleva una carreta o un carro), carretear (conducir algo en carreta o carro), etc. para denotar acciones realizadas en conjunto con el vehículo. Tanto en México como en otros países, este transporte se convirtió en símbolo de poder y moda, pues llevaban los escudos e iniciales de los propietarios, quienes daban muestra de la riqueza que poseían; exquisitos ejemplos de carruajes que recorrieron durante los siglos XV al XVIII los caminos de México y España, y que hoy se pueden encontrar en museos de varias naciones. Para conducir y dirigir los carruajes, son los cocheros de oficio; genéricamente, el término cochero comprende a los conductores de oficio de cualquier género de carruajes de comodidad, y para muchos efectos incluso a los conductores de cualquier género de carruajes, se llamarán chauffeur, auriga, cocheros, mayorales, caneleros, conductores, etc., sin embargo, con el desarrollo de los vehículos de motor, los coches de caballos prácticamente han desaparecido de las poblaciones y los caminos siendo sustituidos por éstos salvo para ocasiones especiales o con propósitos turísticos.»
Fuente y artículo completo: Expresiones veterinarias.